Niña de 11 años le pide a Dios que perdone a ISIS
Irak
Cuando se le preguntó por qué oraba, Myriam Behnam, de 11 años, respondió rápidamente: «Cuando oro, le pido que Dios pueda ayudarnos a regresar a casa —dijo—, y para que la paz de Dios pueda venir sobre todo Iraq. Y también, que Dios perdone a ISIS».
Myriam, su hermana de 10 años, Zamarod, y sus padres, Walid y Alice, huyeron de su hogar cerca de Mosul, Iraq, hace más de un año cuando el autoproclamado Estado Islámico (ISIS) obtuvo el control de Mosul y las llanuras de Nínive. Desde entonces, la familia ha vivido en la región septentrional del Kurdistán junto con más de 1 millón de otros iraquíes desplazados. La vida no es fácil en el campo de refugiados, pero Myriam no alberga ninguna amargura.
«Solo le pediré a Dios que perdone [a ISIS] —dijo en una entrevista de marzo de 2015 con SAT-7 TV—. ¿Por qué deberían ser asesinados?». El sorprendente perdón de Myriam a ISIS llegó a millones después de ser transmitido en la estación cristiana de televisión por satélite.
Aunque es difícil saber cuántas personas vieron la entrevista en SAT-7, sus cinco canales llegan a una audiencia de 15 millones de personas en el norte de África y Medio Oriente. Además, el video fue copiado digitalmente numerosas veces y se hizo viral en las redes sociales, y llegó a más de 1 millón de personas en línea. Su entrevista inspiró la etiqueta en las redes sociales #PrayForMyriam.
Myriam dijo que está agradecida por la forma en que Dios ha usado la entrevista para llegar a las personas con Su mensaje de perdón.
«Estoy agradecida por todo lo que se ha hecho por nosotros —dijo—. Se nos ha dado comida y esta [casa móvil] para vivir, y nos han suplido nuestras necesidades esenciales. Las palabras que les estoy diciendo no vienen de un lugar aleatorio. Vienen del Espíritu Santo. El Espíritu Santo me da estas palabras para decirles. Y es la verdadera necesidad del Espíritu para la gente».
UNA FE MODELO
La capacidad de Myriam para perdonar a los extremistas islámicos está arraigada en las Escrituras, de las que le encanta hablar.
«En la Biblia, Jesucristo nos dijo: “No tengan miedo, yo estoy con ustedes” —dijo—. Y también, dijo: “Perdona a los demás sin importar quién te odie. Tienes que perdonarlos”».
Su fe es alentada por la de sus padres, quienes ayudaron a Myriam y a Zamarod a desarrollar amor por la Biblia al asistir a la iglesia y cantar himnos.
El padre de Myriam dijo que no podía estar más orgulloso de cómo su fe ha inspirado a millones y glorificado a Dios.
«Pienso que Dios me dio una buena hija para difundir la Palabra de Jesús a todo el mundo a través de los medios de comunicación», dijo Walid. Está agradecido de que Myriam vea la entrevista no como una forma de hacerse famosa, sino como una manera de glorificar a Dios y compartir un mensaje de paz.
El reportero de SAT-7 quien entrevistó a Myriam, Essam Nagy, dijo que es claro que proviene de una familia cariñosa que fomenta la fe. Recuerda que Myriam fue tan persistente en querer ser entrevistada que lo tomó de la mano durante 45 minutos.
Essam piensa que su historia resonó con tanta gente, incluido él mismo, porque necesitaba escuchar un mensaje de esperanza durante un tiempo de desesperación.
«Creo que necesitamos ver la verdad y la luz dentro de la oscuridad —dijo—. Myriam vive en un ambiente no muy bueno, pero lleva mucha paz dentro de ella. Y creo que a todos los que viven en Medio Oriente, y en el extranjero, les encantaría ver esta cantidad de esperanza. La gente de Medio Oriente necesita esa esperanza, y que la gente en el extranjero sepa todo sobre el Medio Oriente no es tan malo. Todavía tenemos estas joyas y esta cintilante luz sigue brillando incluso en la oscuridad».
ESPERANZA PARA EL FUTURO
La vida como refugiado no es fácil, pero la familia de Myriam sabe que su situación es mucho mejor de lo que podría haber sido. Myriam asiste a la escuela, lo cual le proporciona una sensación de normalidad.
«Me encanta todo en la escuela —dijo—. Por ejemplo, a través de las matemáticas puedo aprender a contar. Con la ciencia, puedo aprender muchas cosas sobre el universo. Recibiré mucha educación a través de las diferentes materias de la escuela».
A medida que seguimos escuchando historias de extremismo islámico y persecución cristiana en las noticias, Myriam alienta a aquellos en Occidente, especialmente a los niños, a reflejar el amor de Dios en su propia vida.
«Me gustaría animar a los niños de los Estados Unidos a amar a Dios y a compartir su fe con sus amigos en todas partes —dijo—. No necesitan estar asustados. Además de las cosas que suceden en su vida, deben aprender de nosotros y de nuestra vida. Esto no debe ser para recibir algo o para obtener gloria para nosotros mismos. Es para la gloria de Dios, y no voy a hacer esta entrevista para conseguir algo para mí o para el bien de mi familia. Es para Dios porque Dios vive, y queremos hacer todo para la gloria de Dios y también para exaltarlo».